El riego solar fotovoltaico es un medio de autoconsumo energético que utiliza las placas solares para el riego de los cultivos. Tiene como objetivo reducir la factura de luz de los agricultores. La energía generada a través de los paneles solares será utilizada para alimentar los sistemas de bombeo de la instalación de riego de la explotación agrícola.

¿CÓMO FUNCIONA EL RIEGO SOLAR FOTOVOLTAICO?

El primer paso para la instalación de un riego solar fotovoltaico es la búsqueda de una fuente de agua, que se suele situar en el subsuelo alejada del campo de cultivo, como por ejemplo un pozo. Ese agua llega desde la fuente de agua hasta el cultivo agrícola y se distribuye de manera uniforme para que todos los cultivos estén suficientemente regados.

El funcionamiento del sistema de riego solar fotovoltaico es el siguiente:

• El sistema de bombeo se instala en la fuente de agua e impulsa el agua hacia la superficie.
• Para activar la bomba de agua es necesario el uso de electricidad. Esta electricidad es generada a través de las placas solares gracias a la energía del sol.
• El inversor de las placas solares transforma la corriente continua en corriente alterna, lista para ser usada.
• La corriente llega hasta la bomba de agua y comienza a extraer el agua hacia la superficie, hasta un lugar donde se pueda almacenar.
• Cuando sea necesario, el agua se distribuye mediante el sistema de riego que se extiende por el cultivo, llegando a todos los rincones del cultivo.
• Un sistema de grifos distribuidos a lo largo de las tuberías, abren y cierran el agua según sea necesario, aportando un riego por goteo o por aspersión.

VENTAJAS DEL RIEGO SOLAR FOTOVOLTAICO

El riego solar fotovoltaico está cada vez más extendido, ya que sus múltiples ventajas hacen que sea una solución cada vez más habitual en los campos. Las principales ventajas con las que cuenta son:

• Produce menos contaminación ambiental, ya que al cambiar diésel por energía solar no realiza emisiones a la atmósfera. De esta forma, el cultivo se convierte en más ecológico y respetuoso. Los sistemas de riego de este tipo funcionan con la energía del sol, por lo que no supone ningún daño ni contamina el planeta. Al aprovechar este tipo de energía se emiten menos gases de efecto invernadero y se ayuda a frenar el cambio climático.
• No necesita combustible. Una vez instalado el riego, no se necesitará repostar e invertir en combustible para el riego, ya que funciona a través de energía solar.
• El mantenimiento es más sencillo en comparación a los sistemas de riego tradicionales. Además, la instalación del riego con energía solar no requiere una inversión inicial muy elevada. Se deben instalar las placas solares y la conexión con el sistema de riego, por lo que ese gasto inicial se compensará en poco tiempo cuando el consumo disminuya de manera considerable.
• Permite conducir el riego a zonas muy lejanas a las que no tenían la oportunidad de llegar, debido a la dificultad de que la red eléctrica llegara hasta allí.
• Genera una mayor productividad en las cosechas. Con un riego más habitual, las zonas con menos recursos podrían aprovechar mejor su suelo. Usar energía solar aumenta la productividad agrícola y las cosechas serán mejores. Podrás conseguir más cosechas durante el mismo período en el que antes se usaba otro tipo de energía.
• Facilita el acceso al agua, ya que muchas zonas del planeta no disponen de agua en buenas condiciones o deben recorrer grandes distancias para conseguirla. El sistema de riego fotovoltaico permite acceder al agua de manera mucho más sencilla.
• Tiene mayor durabilidad, ya que los paneles solares tienen una vida útil de más de 25 años, en función del mantenimiento que tengan.
• Aporta independencia energética, ya que no dependen de las tarifas de riego, librándose así de las subidas cada vez más fuertes de las facturas eléctricas.
• Permite almacenar la energía. En caso de que el sistema genere más energía y ésta no se consuma en su totalidad, se puede almacenar para otro momento. Esto supondrá un ahorro notable.

¿A QUIÉN VA DIRIGIDO EL RIEGO SOLAR FOTOVOLTAICO?

El riego solar fotovoltaico va dirigido a:

• Cultivos en zonas lejanas o en desarrollo, donde no suele llegar la red eléctrica o llega con dificultad.
• Cualquier tipo de explotación agrícola y ganadera, sin depender del lugar donde se encuentre.
• Huertos y cultivos personales. Este sistema de riego también se puede utilizar para uso particular, ya que se adecua al tamaño que necesites.

Aun así, a la hora de elegir el terreno se deben evitar algunos factores como sombras de edificios y montañas, zonas con mucha exposición a nubes o niebla, exceso de nieve o zonas donde haya fuertes vientos.

Apuesta por un proyecto de Autoconsumo solar fotovoltaico en el sector agrícola y comienza a ahorrar desde el primer momento. Compara entre los mejores precios del mercado y recibe un presupuesto personalizado de manera completamente gratuita.